Tras la violenta represión a los docentes que intentaban instalar una carpa y escuela itinerante frente al Congreso, el vicejefe de Gobierno, Diego Santilli, argumentó que “no había permiso” para armar la estructura en esa plaza, pero confirmó que se avalará la carpa “siempre y cuando se haga como corresponde el pedido formal”.
«La Ciudad de Buenos Aires está dispuesta a autorizar el permiso», confirmó Santilli, horas después de la represión con golpes, gas pimienta y detenciones contra los maestros que pretendían realizar el acto en el marco del reclamo salarial y por una paritaria nacional.
Pese a la tardía afirmación de Santilli, lo cierto es que Ctera ya había presentado una nota formal, el viernes último, dando aviso sobre la realización del acto. El Gobierno porteño –que ahora se muestra concesivo- justificó la represión diciendo que la carta no cumplía los requisitos en materia de uso del espacio público.
En declaraciones a radio La Red, Santilli también justificó la represión. Sostuvo que “la policía (de la Ciudad) actuó de manera defensiva ante un grupo minúsculo que produjo provocaciones”.