En este marco, y al cumplirse un año de la huelga que llevan adelante sus trabajadores, se presentó el cuadernillo «El conflicto de Lácteos Vidal. Un caso paradigmático sobre el derecho a huelga y la libertad sindical” elaborado entre la Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera de la República Argentina (ATILRA) y el Observatorio de Protesta Social (CITRA/CONICET).
Además de la diputada Alonso, quien preside de la Comisión de Trabajo de la Cámara baja, participaron del encuentro la diputada nacional Vanesa Siley; el secretario general de ATILRA seccional General Rodríguez, Heber Ríos; la investigadora del CONICET, Ana Natalucci; el secretario general de la Federación Gráfica Bonaerense, Héctor Amichetti y Franco Yendro, delegado de Lácteos Vidal; quienes ante un nutrido público ligado al mundo sindical repasaron el conflicto de los y las trabajadoras con la empresa, el contexto social, político y sindical en el que se desarrolla y las perspectivas del mundo del trabajo en el marco del proceso electoral.
La diputada Soledad Alonso fue la primera en tomar la palabra y aseguró que «es un honor que estemos acá pudiendo hablar de un tema que tiene que ver con el movimiento obrero». Y agregó: «Esperamos que este camino iniciado por la lucha de los trabajadores y las trabajadoras pueda ser un emblema de bandera para seguir defendiendo los derechos y resistiendo muy profesionalmente a la derecha».
El cuadernillo reconstruye el conflicto de los trabajadores y la empresa Lácteos Vidal, iniciado el 18 de julio del 2022 debido ciertos incumplimientos relativos al Convenio Colectivo de Trabajo y la seguridad e higiene en la fábrica, que se pudieron comprobar en reiteradas inspecciones realizadas por el Ministerio de Trabajo de la Provincia de Buenos Aires.
A poco de cumplirse un año de huelga, la empresa de Carlos Casares no sólo se ha resistido fervientemente a participar de las instancias de diálogo dispuestas por el Ministerio y a cumplir con lo dispuesto por la Justicia, sino que presentó denuncias penales contra los trabajadores, delegados y dirigentes de ATILRA, en un claro intento de correr el conflicto del fuero laboral al penal.
«La participación de actores externos al conflicto, como el Movimiento Empresarial Anti-Bloqueos y los medios de comunicación, han favorecido la acción empresarial orientada a la fuerte estigmatización y persecución a dirigentes y organizaciones sindicales, con el claro objetivo de ensayar acciones tendientes a la criminalización de la protesta que nos están anunciando en el contexto eleccionario», sostienen los organizadores, quienes aspiran a que el encuentro sea el puntapié inicial de un espacio de diálogo entre sindicatos, trabajadores y dirigentes políticos, para construir consensos tendientes a garantizar los derechos vigentes.