En medio de los cruces y las acusaciones mutuas por el aumento de la inseguridad, la intendenta de La Matanza, Verónica Magario, y el ministro de Seguridad bonaerense, Cristian Ritondo, mantuvieron un encuentro en La Plata para bajar la tensión y planificar políticas en conjunto.
La polémica estalló tras el crimen del colectivero Leandro Alcaraz. Magario criticó a la Provincia por la falta de efectivos en el municipio y reclamó el traspaso de la Policía Local. Ritondo le salió al cruce y la acusó de malgastar el Fondo de Fortalecimiento de Seguridad que el Gobierno giró a los municipios en 2016.
«Estamos empezando una nueva etapa», subrayó Magario. «Apostamos a que el trabajo en conjunto muy pronto se refleje en las calles del distrito para que los vecinos de La Matanza puedan tener mayor seguridad y vivir mejor porque se lo merecen», agregó la mandataria comunal tras el encuentro.
Ritondo fue más escueto: se limitó a informar que el objetivo del encuentro fue «coordinar acciones en conjunto» con la jefa comunal.