Son incontables la cantidad de veces en las que los candidatos de Cambiemos apelaron al “no aflojemos”. En el cierre de la campaña para las PASO, el grito discursivo del oficialismo fue de 180°.
Como sea, Cambiemos pasó del corazón que no hace “tuc, tuc” sino “sí, se puede” al “no aflojemos”. Un mensaje distinto, de redoblar el “aguante” a una gestión frente a la mirada esperanzadora con que supieron abrir la campaña.
Con la Gobernadora metida de lleno en la campaña, Vidal entró de nuevo entre medio de la gente aunque esta vez su andar estuvo protegido por un vallado. Una vez en el centro de la escena, la mandataria comenzó a enumerar lo que postuló como logros personales de sus candidatos.
“Así, rubia como la ven a Gladys Gozález se llevó puesto un sindicalista corrupto y lo metió preso”, señaló y agregó: “Y esta Graciela que como dice el dicho, lo bueno viene en frasco chico. Es una mujer con una fuerza y una integridad enorme”.
“Y esta Toty de La Matanza”, continuó Vidal y ponderó que “eligió el camino difícil porque defendió el trabajo como manera de crecer y terminó dándole trabajo a gente que no tenía oportunidades, salió de ser piquetero y cortar calles a dar trabajo”.
Acto seguido, como no podía ser de otra manera, la Gobernadora retomó el discurso de la “pesada herencia”: “Volvamos y nos acordemos de octubre de 2015, por un lado estaba la alternativa de Cristina, Scioli y Anibal Fernández, y por otro lado Mauricio y yo, de ahí hasta hoy, piensen qué cambió, acuérdense de eso y hoy hay esperanza, cambio que en diciembre del 2015 cuando ibas a un hospital público había medicamentos hasta julio y hoy hay medicamentos todo el año”.
Pero además, Vidal devolvió gentilezas al resto de los candidatos de la oposición que la habían criticado: “El resto de los candidatos que representan a las otras fuerzas no te van a solucionar esos problemas que no te solucionaron antes, ahora los escuchamos hablar de un país como si no hubiesen gobernado cuando formaron parte del mismo sistema que gobernó la Provincia por más de 25 años”.
Y agregó: “Hacen discursos lindos, hablan y prometer es fácil pero hacer es más importante, ellos no escucharon, a ellos no les importaron los bonaerenses sino los votos de los bonaerenses”.
Vidal, resalto también algunos logros y los proyecto hacia futuro: “La inflación este año va a bajar a la mitad que la del año pasado. Volvieron los créditos hipotecarios y cada dos minutos alguien es dueño de tu casa”.
“Y si sos jubilado podes recibir la jubilación que te mereces y eso pasó en esos 19 meses no pasó antes y en esos 19 meses no es verdad que empezaron los problemas de tu trabajo. Por primera vez, es mentira que no nos importa tu trabajo”, apuntó Vidal.
Sobre el tramo final de su oratoria, Vidal rogó: “Tenes que creer porque esta vez por primera vez el cambio es de verdad, es desde los cimientos. Cambiemos es un grupo de personas que, como te pasaba a vos, nos enojábamos porque la política no te cambiaba la vida de verdad, todos los que te dicen que hacemos las cosas mal era la que se nos gastaban los recursos diciéndote que ibamos bien cuando íbamos a ser San Cruz o Venezuela”.
Luego retomó el eje de las comparaciones odiosas: “En el 2015 vivías con un gobierno que te agobiaba, con tensión y que te decía lo que tenías que pensar, era un gobierno de gente de grandes oratorias pero que vivías sin cloaca, ni ruta”.
“No aflojes, fuerza, me decían rezo por vos porque saben que estamos dando la pelea y yo te necesito ahí dando la pelea con nosotros.”, finalizó Vidal no sin antes decir el mantra: “Juntos es posible”.