Esta tarde el Indec difundió las cifras de pobreza en la Argentina, que en plena campaña de cara a las elecciones, le dan al gobierno de Cambiemos un espaldarazo para llegar a octubre.
El organismo, con datos que surgen de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH), informó que la pobreza en Argentina bajó a 28,6 por ciento en los primeros seis meses del año, con relación a las cifras de finales de 2016.
Pero los datos no son tan alentadores para los bonaerenses, ya que en el distrito más poblado del país, la pobreza supera la media nacional, con un 24,7 por ciento de hogares pobres.
Según difundió el Indec, en los partidos que conforman el Gran Buenos Aires, el 32,6 por ciento de las personas vive por debajo de la línea de pobreza, mostrando una amplia brecha con los habitantes de CABA, a quienes la pobreza afecta en un 13,4 por ciento.
A pesar de que la cifra de pobreza a nivel nacional parece alentadora, existen todavía 11,3 millones de argentinos pobres y los niveles de indigencia se mantuvieron en 6,2 por ciento, impactando aún a 2,4 millones de ciudadanos que no satisfacen sus necesidades básicas.
El índice de pobreza es una cifra fundamental para los gobiernos de Mauricio Macri y María Eugenia Vidal, que ya habían adelantado que el organismo mostraría un descenso de la pobreza en plena campaña electoral. A partir de este nuevo informe, desde Cambiemos usarán los datos para fortalecer su promesa de «pobreza cero».
¿Qué es la línea de pobreza?
La medición de ese índece que realiza la Encuesta Permanente de Hogares con el método de la “línea de pobreza” consiste en establecer, a partir de los ingresos de los hogares, si estos tienen capacidad de satisfacer –por medio de la compra de bienes y servicios– un conjunto de necesidades alimentarias y no alimentarias consideradas esenciales.
